Resumen

Emocionantes series en Valencia entre Fènix y Cambre, resueltas a favor de un equipo ché que ha tenido que emplearse a fondo para batir a la pinha amarila, especialmente en el primer encuentro en el que Leonella Fortunata entró en el círculo gallego.

La pitcher de Curaçao ya mostró sus habilidades con los doce strikeouts con los que sumó la primera victoria de Cambre esta temporada ante Dridma y ante Fènix su actuación fue incluso mejor, permitiendo menos hits y dibujando la zona con sus lanzamientos. En los cinco primeros innings La novena local solo consiguió conectar un hit en el tercero, un triple de Raquel Rodrigo que acabó en carrera, en el resto jugadora que entraba al cajón jugadora que volvía al dugout sin pasar por primera.

Cambre aprovechó para adelantarse en el segundo inning ante Eva Soto con dos carreras impulsadas por los sencillos de Paula y Laura Paz y el doble de Fátima Núñez. La novena gallega ofreció más peligro en estas primeras entradas pero la defensa de Fènix ató corto el resultado consiguiendo dos outs en home, y a pesar del fly de sacrificio del 1-3 de Soengas en el cuarto el equipo valenciano mantenía sus opciones en los turnos finales. Esa labor de contención no encontró respuesta al bate hasta la parte baja del sexto inning. Fènix buscaba llegar a base como fuera, era importante que la primera bateadora se embasara y lo consiguió con el bunt de Elizabeth Colmenares que rompió la sequía bateadora de su equipo y dio un empujón anímico a la remontada. Fènix aprovechó el momentum, reiniciaba el orden al bate y lo hacía con Irene Llorens, que no dejó pasar la oportunidad y conectó un single por el left.

Fortunata empezó a notar el cansancio y no pudo mantener la calidad de su hasta el momento excelente outing y cedió su primera base por bolas del partido, también su primer hit by pitch y un wild pitch que sumado a un error defensivo desdibujó a Cambre y permitió que Fènix diera la vuelta al marcador y se pusiera por delante por primera vez 4-3, a falta de un inning.

Liliana Otermin fue la encargada de evitar que Cambre anotara en su último turno al bate, respaldada por una defensa aérea y terrestre que selló el marcador definitivamente y confirmaba la victoria de Fènix.